“Quiero, pues, que en todas partes los hombres oren, levantando las manos al cielo con pureza de corazón, sin enojos ni contiendas”. 1 Ti 2:8 ( NVI)
La oración constante en todo lugar, derriba barreras
Que nuestros gobernantes administren bien el poder otorgado por Dios, y sean identificados por establecer y mantener relaciones justas.
Que el respeto a las diferentes opiniones o posiciones políticas, la sencillez y la honestidad, sean señales distintivas de las autoridades para con todos.
Porque la Iglesia sea embajadora de reconciliación de Dios con los hombres.
Que como Iglesia oremos, para que nada estorbe la voluntad de Dios en este gobierno nacional.
¡ Que en Uruguay sea hecha la voluntad de Dios !
Amen! Hay poder en el acuerdo! Que toda la iglesia de Cristo, se siga uniendo! Haya un mismo clamor! Bendiciones!
Amén a esa oración, nos sumamos a pedir al Padre sobre estos puntos