
El humor y la risa: factores de resiliencia que nos llevan a reírnos de nuestras adversidades y a hacer bromas con nuestras desdichas, nos mantienen esperanzados tomando distancia de lo doloroso.
El humor fortalece el sistema inmunológico y reduce las hormonas del estrés sanando emocional y físicamente. «El corazón alegre constituye buen remedio», Pr. 17.22
Por el humor una persona «...no se romperá ni se vendrá abajo (...) y se convertirá en una verdadera fortaleza humana». (Bernabé Tierno).